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Foto del escritorLiz Maldonado

Fieles mayordomos

Comencemos con la siguiente pregunta: ¿Has pensado en los tesoros que Dios pone en tus manos?

Dios ha creado absolutamente todas las cosas, y con ello nos ha dotado de dones y habilidades; mismos que han sido dados para dar gloria a Su nombre. Nosotros no somos dueños de nada, ni merecedores de nada; nos lo da por gracia y en respuesta a ello, nos da la capacidad de ser mayordomos de Sus bienes, incluyendo nuestra vida.



Para empezar, ¿qué significa mayordomía? En la Biblia, el mayordomo es aquel encargado de administrar los bienes y recursos de un hogar o de un reino que pertenecen a otro.

“Pero por la gracia de Dios soy lo que soy, y su gracia para conmigo no fue en vano. Antes bien, he trabajado mucho más que todos ellos, aunque no yo, sino la gracia de Dios en mí.” -1 Corintios 15:10 NBLA

Por lo tanto, nosotros somos los mayordomos de todo aquello que Dios nos ha entregado, ya sea bienes, dinero, reino, familia, incluso nuestra vida. Todo es suyo, todo le pertenece; por lo tanto, es nuestra responsabilidad cuidar todo lo que ha puesto en nuestras manos, eso muestra nuestra obediencia. La cuestión es preguntarnos si somos buenos o malos mayordomos, y lo hacemos no porque seamos buenos, sino por Su gracia. Muchas veces no tenemos esa capacidad, pero vamos a Él en oración, pidiendo que nos capacite, nos fortalezca y nos dé la habilidad de ser buenos administradores.

“Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría. Y Dios puede hacer que toda gracia abunde para ustedes, de manera que siempre tengan todo lo necesario, y aún más, para hacer toda buena obra.” -2 Corintios 9:7-8 NBLA

Aunque Dios nos da todo para disfrutar de ello, seamos responsables y sabios para hacer buen uso de lo que pone en nuestras manos, y así cumplir Su propósito.


Por lo tanto, somos llamados a rendir cuentas de todo, incluso nuestro tiempo, recursos económicos, talentos, dones, sabiduría, ministerios, relaciones y autoridad.

“De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí mismo." -Romanos 14:12 NBLA

Tenemos que ser fieles con todo lo que Dios nos da, sin olvidar que su providencia y amor nunca faltan, que recibimos su favor sin merecerlo, pero con el propósito de glorificar Su nombre y servirle. ¡Nuestra mayordomía es la respuesta a Su amor!

 


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